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El lugar del padre

Por Luis Polo(*)

Entre los cambios que el siglo XX produjo en las conformaciones familiares se encuentra la del padre.

En los albores del siglo era una figura definida, representaba el emblema de la autoridad familiar y el que hacía el vínculo con lo social. Cuando se vio que el padre podía generar conflictos su figura comenzó a ser cuestionada y modificada. Carta al padre, de Franz Kafka, ilustra este pasaje.

De alguien distante y trágico pasó a ser cercano y pasible de ser cuestionado. Se produjo una transformación, solidaria con otras operadas en la sociedad en la moral sexual, en la procreación y en la convivencia (Déborah Fleischer. Clínica de las transformaciones familiares).

Se desprende que la familia no responde a una estructura inmodificable, es una construcción social de cada época. Concepción opuesta a la del orden natural en la sociedad, en donde se aboga por el retorno al padre patriarcal anterior a la modernidad, es un retorno al orden religioso, a una figura concebida de acuerdo al padre celestial. (Elizabeth Roudinesco. La familia en desorden)

Hay numerosos estudios que demuestran que la familia occidental del siglo XIX es la heredera de los ideales del Iluminismo y de la organización económica industrial y que más adelante se tornaría permeable a la influencia de la Ciencia y la Técnica.

A fines de ese siglo la mujer se dirigió a Freud con su malestar - lo que permitió inventar el método psicoanalítico -, salió del reducto familiar y fue a la conquista de su igualdad social, en ese tránsito el niño adquirió derechos propios y el hombre incorporó los ritos domésticos a su subjetividad.

En su teoría Freud intenta rescatar al padre moderno, lo ubica en un lugar de privilegio, en el origen de la cultura, en las fantasías originales, en el complejo de Edipo.

En el Edipo freudiano el padre representa a la ley, pone límites al deseo materno, pero he aquí lo interesante, queda sometido a la ley y por lo tanto no está a la altura de la misma, tiene síntomas, es traumático.

Lacan basándose en lo que observa en la cultura de su tiempo quita las características trágicas al padre edípico, ya no es traumático, lo acerca a una figura de comedia o irrisoria.

En su enseñanza hay un recorrido que comienza con el padre simbólico que garantiza la estructura subjetiva, pero como en los relatos que hacen de sus sufrimientos los sujetos no se encuentra un padre para todos, no es un símbolo que representa un mismo sentido en todas las subjetividades, Lacan teoriza entonces la pluralización del padre.

Culmina con el padre como un síntoma (simthome), un elemento que anuda la estructura pero no garantiza nada.

 

En la Cultura de hoy

La novela y el cine se han ganado un espacio en las discusiones sobre las transformaciones familiares.

Una novela, El lugar del padre (Angela Pradelli, Argentina, premio Clarín 2004 a la novela), que motivó este artículo, y tres películas recientes, El gran pez (Tim Burton, EE.UU) y El camino de las nubes (Vicente Amorín, Brasil) y Ella me odia (Spike Lee, EE.UU) muestran la diversidad del padre.

En El lugar del padre la narradora es una mujer a la que se le ha muerto su padre y mantiene una relación de amistad con Ramón, un amigo de aquél. Ramón es la metáfora encarnada del muerto, es su alter ego viviente. El logro narrativo está en el estilo simple y en la cotidianidad de lo que se cuenta, no hay proezas ni tragedias, pese a ello la hija no puede dejar de admirar a su padre y adopta su mirada. El padre tiene cierta exterioridad en relación al hijo.

En El gran pez el padre es un hombre seductor y cariñoso y el relator de sus grandes proezas, tan magníficas que están en el límite de la ficción. Aquí, es la incredulidad del discurso del padre lo que genera sobre sí mismo su propio alter ego.

En El camino a las nubes, basada en un hecho real, el padre es una autoridad indiscutible y el hijo es la macilla que aquél moldea, con el consentimiento materno. El planteo es que un hijo es el alter ego del padre.

En la relación padre-hijo el psicoanálisis sostiene una inversión, es el hijo el que hace padre a un sujeto a través del deseo materno, por lo tanto el deseo materno es una condición previa que habilita al padre. Es la tesis sostenida, desde una configuración familiar actual, en Ella me odia.

Freud nunca intentó una ubicación biológica para el padre y en su teoría la noción de identidad del yo queda subordinada a lo inconsciente, queda articulado a una alteridad ajena a la conciencia. El psicoanálisis sostiene la heterogeneidad del lugar, la ubica en el Otro (Germán García. Psicoanálisis dicho de otra manera).

Es una heterogeneidad que opera como íntima para el sujeto. En Lacan, es la madre en el lugar del Otro quien habilita con su discurso al padre, el que a su vez introduce la prohibición del incesto. Por lo tanto el padre es una función que vela ese vacío.

El padre es un efecto de discurso y como tal puede ser encarnado por alguien que no sea el progenitor.

La neurociencia propone un locus neurológico para el padre, lugar que será pasible de estudiar y de modifica a la brevedad, según se anuncia.

Desde la Técnica a través de la aplicación de los principios de la computación a las conductas - y a la lingüística y a las ciencias sociales - se está tratando de crear un nuevo paradigma de conocimiento universal diferente al de la ciencia matemática.

La ciencia establece los nuevos paradigmas sociales, es lo que sostiene J.-A. Miller en El banquete de los analistas.

La ciencia permite a una mujer concebir un hijo sin acto sexual, posibilidad solidaria con la subjetividad femenina de hoy que considera que puede prescindir, también, del vínculo a un padre para criar un hijo, es una evolución de la familia monoparental.

La diferencia entre el genitor y el padre es lo que permitió la ruptura de la familia conyugal como único modelo y la emergencia de la multiplicidad de las formas familiares, algunas de las cuales buscan su legitimidad en el Derecho.

Son transformaciones que instalan nuevos marcos de referencia y promueven nuevos desarrollos teóricos.

 

(*) Médico y Psicoanalista. Miembro de la Biblioteca Analítica Corrientes.

(Publicado en el diario La República de Corrientes)

 

 

 
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